La Organización Mundial de la Salud (OMS) define el autismo como un trastorno del neurodesarrollo. Afecta la capacidad de una persona para comunicarse, interactuar socialmente y comportarse de manera adecuada en diferentes situaciones.
Además, estima que el autismo afecta a una de cada 160 personas en todo el mundo y que es más común en hombres que en mujeres. Es por eso que la mayoría de nosotros tenemos contacto o somos cercanos a personas con autismo.
Destaca también la importancia de un diagnóstico temprano y la implementación de intervenciones adecuadas para mejorar la calidad de vida de las personas con autismo y sus familias.
¿Cuáles son las características distintivas de una persona con autismo?
Las características del autismo pueden detectarse en la primera infancia, pero, a menudo, no se diagnostica hasta mucho más tarde cuando comienzan a verse dificultades en las relaciones interpersonales.
Según el Manual Diagnóstico y Estadístico de los Trastornos Mentales (DSM-5) que es una herramienta utilizada por los profesionales de la salud mental para diagnosticar trastornos, incluyendo el trastorno del espectro autista (TEA) presenta las siguientes características del autismo:
- Déficits persistentes en la comunicación y la interacción social. Esto puede manifestarse como dificultades para iniciar o mantener conversaciones, compartir intereses o emociones con otros, y responder a las señales sociales y emocionales de los demás.
- Patrones repetitivos y restrictivos de comportamiento, intereses o actividades. Esto puede incluir comportamientos estereotipados o repetitivos, obsesiones con ciertos temas o objetos, o inflexibilidad en las rutinas o patrones de pensamiento.
- Síntomas que deben estar presentes en la primera infancia, aunque pueden no manifestarse completamente hasta más tarde en la vida.
- Síntomas que causan un deterioro significativo en el funcionamiento social, ocupacional o en otras áreas importantes de la vida.
¿Cuáles son las causas del Transtorno de Espectro Autista?
la causa exacta del autismo aún no se conoce con certeza. Se cree que es el resultado de la interacción de factores genéticos y ambientales. Algunos de estos factores pueden ser:
- Genética: se ha demostrado que ciertos genes pueden aumentar el riesgo de autismo.
- Factores ambientales: exposición a sustancias tóxicas, como el plomo, durante el embarazo y la infancia temprana, así como infecciones virales durante el embarazo, pueden aumentar el riesgo de autismo.
- Problemas durante el embarazo y el parto: los bebés nacidos prematuramente o con bajo peso al nacer tienen un mayor riesgo de desarrollar autismo.
- Edad de los padres: se ha demostrado que la edad avanzada de los padres en el momento de la concepción puede aumentar el riesgo de autismo.
Es importante tener en cuenta que el autismo no es causado por factores psicológicos, como por ejemplo la forma en que se crió al niño, y no se puede prevenir ni curar completamente.
Sin embargo, con el tratamiento adecuado, los niños con autismo pueden mejorar significativamente sus habilidades sociales y de comunicación.
Si mi hijo tiene autismo ¿Cómo ayudarlo en su adaptación?
En primer lugar, como padres o cuidadores de un niño con estas características, es importantísimo buscar el diagnóstico profesional. Esto nos dará herramientas con las cuales trabajar a favor de un desarrollo lo mas adaptativo posible para nuestro hijo.
Además, estar abiertos a hablar sobre el autismo y sus desafíos. Es importante que el niño sienta que puede hablar abiertamente con sus padres sobre sus experiencias y sentimientos en relación con su trastorno.
La evaluación y el seguimiento de un profesional de la salud mental, puede ayudarnos a identificar las necesidades específicas del niño y desarrollar un plan de tratamiento individualizado.
Los niños con autismo a menudo se benefician de una estructura clara y predecible en su vida diaria. Establecer una rutina diaria que incluya tiempo para actividades específicas, como el aprendizaje, la recreación y el tiempo de descanso, puede ayudarlo sentirse más seguro y cómodo.
Con respecto a la dificultad para comunicarse y los comportamientos repetitivos o estereotipados, se puede trabajar con un terapeuta del habla y el lenguaje para desarrollar habilidades de comunicación y lenguaje.
También se pueden explorar métodos alternativos de comunicación, como el uso de imágenes y sistemas de comunicación por computadora.
Dificultad para comprender
Con respecto a la dificultad para comprender y expresar emociones se puede trabajar con el niño ayudándolo a reconocer y nombrar sus emociones y a desarrollar habilidades para manejar el estrés y la ansiedad.
Para fomentar el juego y la socialización se puede trabajar con un terapeuta ocupacional enfocado en desarrollar habilidades sociales y la participación en actividades recreativas y de juego.
Es muy importante no usar rótulos ni expresiones discriminatorias cuando nos referimos a ellos, al contrario trabajar para fomentar su autoestima. Esto puede incluir celebrar sus logros y proporcionar retroalimentación positiva, así como ayudar al niño a desarrollar habilidades para enfrentar los desafíos.
Cada niño con autismo tiene habilidades y fortalezas únicas. Es importante que como padres y cuidadores trabajemos para identificar y utilizar estos puntos fuertes para ayudarlo a desarrollar una autoimagen positiva.
Aceptar el trastorno puede ser un proceso emocional que lleva tiempo, ser pacientes y compasivos mientras trabajamos con el niño durante su adaptación es fundamental.
5 actitudes saludables frente a una persona con autismo.
Ahora, ¿que pasa si me encuentro con una persona que tiene autismo y no tengo familiaridad con el transtorno? ¿Cómo actuar? ¿Cuál sería la actitud correcta? El miedo a exponernos frente a lo diferente muchas veces nos paraliza . Aqui te dejo algunos consejitos simples sobre algunas actitudes que pueden ayudar:
- Empatía y comprensión: es importante tratar a la persona con autismo con empatía y comprensión ya que pueden presentar dificultades para comunicarse y entender las emociones de los demás. Ser paciente y comprensivo puede ayudar a la persona a sentirse más cómoda y aceptada.
- Respeto a la individualidad: cada persona con autismo es única y tiene necesidades y habilidades diferentes. Es importante respetar la individualidad de la persona y no hacer suposiciones sobre su capacidad o nivel de funcionalidad. Si preguntamos con sinceridad, ellos mismos nos lo explicarán.
- Comunicación clara y sencilla: utilizar un lenguaje claro, sencillo y directo en la comunicación puede facilitar mucho las cosas ya que les puede resultar difícil entender el lenguaje complicado o figurado.
- Aceptación de la estimulación sensorial: las personas con autismo pueden tener una sensibilidad sensorial diferente a la luz, los sonidos, las texturas, etc. Es importante respetarlas y ser consciente del entorno en el que se encuentran.
- Inclusión y accesibilidad: fomentar la inclusión y la accesibilidad para la persona con autismo, lo que puede incluir una adaptación del entorno o la participación en actividades sociales que sean adecuadas para sus necesidades.
Pensando en la inclusión y el respeto a los derechos humanos , la OMS ha creado un Plan de Acción Mundial para el Autismo y ha instado a los países a tomar medidas concretas para mejorar la detección temprana, el diagnóstico y la intervención en el autismo. Además, trabaja para aumentar la conciencia pública sobre el autismo y reducir el estigma asociado a este trastorno.
Bibliografía:
American Psychological Association [APA].(2014). Manual de diagnóstico y estadístico de los trastornos mentales (DSM-5).
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