¿Puedes Volverte intolerante a la lactosa? Entiende las diferencias y cómo manejarlo

Descubre si puedes desarrollar intolerancia a la lactosa, sus tipos, síntomas y cómo convivir con esta condición de forma equilibrada.

Aline Castro

20 Artículos


30 de junio de 2025

Qué es la intolerancia a la lactosa?

A medida que envejecemos, nuestro cuerpo puede reducir la producción de lactasa, la enzima responsable de digerir la lactosa. Por eso, muchas personas desarrollan intolerancia a la lactosa con el tiempo. Aunque no es peligrosa, esta condición puede afectar el bienestar por síntomas molestos como cólicos, hinchazón, gases, diarrea y náuseas.

¿Por qué te vuelves intolerante a la lactosa?

La lactosa es un azúcar presente principalmente en la leche y sus derivados. La enzima lactasa, producida en el intestino delgado, la descompone en glucosa y galactosa, que son absorbidas por el cuerpo. Sin suficiente lactasa, la lactosa fermenta en el intestino grueso, provocando los síntomas típicos de la intolerancia.

Tipos de intolerancia a la lactosa

  • Primaria: la forma más común, ocurre cuando la producción de lactasa disminuye naturalmente con la edad.
  • Secundaria: resultado de condiciones como enfermedades inflamatorias intestinales, infecciones o lesiones; puede ser reversible.
  • Del desarrollo: afecta a bebés prematuros con intestinos inmaduros.
  • Congénita: muy rara; la persona nace sin capacidad de producir lactasa.

Cómo convivir con la intolerancia a la lactosa

Si notas síntomas después de consumir leche o derivados, presta atención a los patrones y reacciones. Por suerte, algunos ajustes simples pueden mejorar mucho tu bienestar:

  • Elige alimentos sin lactosa o leches vegetales;
  • Consume quesos curados (cheddar, parmesano, etc.), que tienen menos lactosa;
  • Revisa las etiquetas de productos procesados y medicamentos — muchos contienen lactosa oculta.

¿Cuándo buscar ayuda médica?

Consulta a un profesional de salud para confirmar el diagnóstico. Pruebas como el test de tolerancia a la lactosa o el test de hidrógeno en el aliento pueden ayudarte a identificar la condición. El médico podría indicar:

  • Suplementos de lactasa;
  • Uso de probióticos para mejorar la flora intestinal;
  • Orientación para una dieta balanceada con calcio y vitamina D.

También es importante descartar otras causas de dolor abdominal, como alergias, úlceras o enfermedades inflamatorias.

Vivir bien con intolerancia a la lactosa

Aunque es común —afecta a cerca del 65 % de la población mundial—, la intolerancia a la lactosa no tiene por qué afectar tu calidad de vida. Con orientación médica y decisiones alimentarias inteligentes, puedes seguir disfrutando de una alimentación variada y deliciosa.

Volver

Los comentarios están cerrados.