La prevención del cáncer de mama comienza incluso antes del embarazo, porque si la futura madre no presta atención a su estilo de vida, especialmente a su dieta y ejercicio, y aumenta su peso, esto afectará al feto durante el embarazo.
Entonces, si el bebé nace con sobrepeso, tendrá un mayor riesgo de enfermedades en su vida, y si este es “la” bebé, tendrá un riesgo excesivo de cáncer de mama.
Y más aún. Si durante la infancia, este niño se ve influenciado por una dieta rica en calorías vacías, con exceso de azúcar, grasas y alimentos refinados y procesados, el riesgo de cáncer de mama será aún mayor.
El crecimiento excesivo es un factor de riesgo
Uno de los factores que predispone al cáncer es el crecimiento excesivo del niño. Es decir, las mujeres más altas corren un mayor riesgo.
Para explicarlo, los investigadores se refieren al estilo de vida que tenían estos niños en su infancia, principalmente debido a una dieta alta en calorías vacías y poca actividad física.
Durante algunos años he observado clínicamente que los niños vegetarianos crecen más lentamente que los no vegetarianos.
Esto probablemente se deba al exceso de calorías y proteínas que consumen los no vegetarianos. Esto ha sido una preocupación para los médicos, quienes a menudo acusan a la dieta vegetariana de ser problemática para un crecimiento óptimo.
Pero la evidencia moderna indica lo contrario: el rápido crecimiento que ocurre en muchos niños con dietas altas en calorías vacías y proteínas es en realidad un envejecimiento prematuro y un factor en la producción de cánceres, en este caso cáncer de mama, con seguridad.
Inicio temprano de la menstruación
Uno de los mecanismos para explicar el aumento del riesgo de cáncer de mama es el inicio temprano de la menstruación. A principios del siglo XX, las niñas comenzaron sus períodos entre los 17 y los 18 años.
Hoy en día, ocurre entre los 12 y los 13 años y, en algunos casos, mucho antes. Una dieta alta en grasas y el aumento de peso en la infancia pueden ser la causa de esta menstruación prematura.
Cuando la menstruación comienza temprano, habrá más exposición a la hormona estrógeno y esta exposición aumenta el riesgo de cáncer de mama, ovario y útero.
Cuidado extra con el cuerpo
El ejercicio, o la falta de él, tiene un efecto similar. Cuando una mujer hace demasiado ejercicio, como en el caso de los atletas olímpicos, pueden producirse períodos menstruales más prolongados e incluso una interrupción completa de la menstruación.
Por lo tanto, el ejercicio «quemará» el posible exceso de calorías y evitará la producción prematura de estrógeno que se obtiene a partir de las grasas.
Cáncer de mama y sobrepeso
Aunque tenemos una estadística de que el sobrepeso previene el cáncer de mama, que ocurre antes de la menopausia, por otro lado, el sobrepeso aumenta el cáncer de mama después de la menopausia.
El tema es controvertido porque, de hecho, si una mujer tiene sobrepeso antes de la menopausia, será muy difícil de controlar después de la menopausia.
Mi experiencia clínica ha demostrado que las pacientes que tienen más dificultades para perder peso son las mujeres posmenopáusicas.
Por lo tanto, no vale la pena aumentar de peso en la infancia ni en ningún período premenopáusico. Además, tener sobrepeso a cualquier edad aumenta el riesgo de otras enfermedades y cánceres.
De todos modos, el efecto de los estrógenos es muy importante. Es por eso que los padres deben orientar a sus hijas a adquirir un estilo de vida saludable, con ejercicio diario y una dieta rica en frutas y verduras frescas, cereales integrales y frijoles, bajos en grasas, carnes, frituras, cereales refinados y otros alimentos perjudiciales.
El cáncer de mama, es el más frecuente entre las mujeres – hay 2 millones de casos al año – y es una de las mayores causas de muerte en el mundo – más de 500 mil por año: la mejor estrategia para prevenirlo es cambiar el concepto de que un el niño que crece más rápido es más saludable.
De hecho, este rápido crecimiento no es más que un rápido envejecimiento que producirá más enfermedades en un futuro no muy lejano.
Hildemar Santos – Médico y profesor de la Facultad de Salud Pública de la Universidad de Loma Linda (EE. UU.)
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