Perdonar alivia las cargas emocionales, promueve el bienestar físico, reduce el riesgo de enfermedades cardíacas, disminuye la presión arterial y fortalece el sistema inmunológico.
En tiempos de crisis, no deseches tus hábitos, espirituales, mentales, físicos y sociales, te ayudarán en el proceso más difícil; Dios hará su parte, no dejes de hacer la tuya.
Estamos viviendo en una época de crisis. Sin embargo, incluso cuando todo parece estar fuera de lo normal, existen grandes oportunidades de crecimiento.
Está comprobado que la fe es un punto importante en el proceso de cura de las enfermedades. Sus efectos van más allá del desarrollo del optimismo y la esperanza frente al desafío. La fe puede influir hasta en la cantidad de medicamentos utilizados en un tratamiento.